
Todos nosotros podemos ayudar a dejar de ser parte del problema con unas cuantas medidas, muy sencillas, a llevar a cabo en casa y así ayudar a frenar el cambio climático: las que vemos aquí tienen que ver con Reducir el Consumo Energético
1. Cambiar las bombillas incandescentes
Por cada bombilla de bajo consumo, se ahorran 45 Kg de CO2 al año, gasta menos del 80% de energía y dura entre 8 y 10 veces más.
Las Lámparas halógenas caracterizan por una mayor duración que las incandescentes y la calidad especial de su luz. Existen lámparas halógenas que necesitan de un transformador. Los transformadores de tipo electrónico disminuyen la pérdida de energía con respecto a los convencionales; y el consumo final de electricidad (lámpara más transformador) puede ser un 30% inferior al de las bombillas tradicionales.
2. Apagar la televisión y el ordenador.
Si se apagan con el mando a distancia siguen consumiendo energía. El 10% del consumo energético de nuestras casas se debe a que dejamos los aparatos en «stand by». Si apagamos la pantalla del ordenador cuando no la necesitamos se evita, además de radiaciones innecesarias, el consumo de electricidad. Que sepáis, que el salvapantallas que menos consume es el negro.
Y también se deben apagar la impresora, escáner y altavoces cuando no se estén utilizando. Una buena idea es conectar algunos equipos (televisores, cadena musical, DVD, decodificador digital, amplificador de antena) a “ladrones” o regletas de conexión múltiple con interruptor. Al desconectar el ladrón, apagaremos todos los aparatos a él conectados y podemos conseguir ahorros superiores a 40 euros anuales.
También el cargador del móvil, aunque no esté conectado el teléfono, seguirá consumiendo, no cuesta nada desenchufarlo.
3. Electrodomésticos Clase A
Si en casa vais a comprar electrodomésticos, los de clase A son los que consumen menos energía (puedes tener más información sobre etiquetas en nuestra entrada sobre etiquetado). Eso significa que aunque sea más caro, el menor gasto en electricidad compensará esa diferencia económica, y al final de la vida útil del aparato habréis ahorrado cientos de euros. El uso de un centro de planchado puede llegar a suponer un ahorro del 48% frente a una plancha tradicional, y una curiosidad, el consumo usando una maquinilla eléctrica puede ser menor que con una de uso natural, todo dependerá del tiempo que mantengamos abierto el grifo del agua caliente (www.idae.es).
4. Calefacción y Aire Acondicionado
En invierno, la calefacción a una temperatura de 21ºC es suficiente para mantener el confort de una vivienda. Si te vas a ausentar por unas horas reduzca la posición del termostato a 15ºC (posición “economía” de algunos termostatos).
Cierra las persianas y cortinas por la noche: evitarás importantes pérdidas de calor.
Y para el aire acondicionado, fija la temperatura en 26ºC, por debajo de eso no enfriará la casa más rápido y tendrá un gasto excesivo. Como en el caso de la calefacción, los medios mecánicos funcionan, es decir, los toldos, parasoles, cerrar cortinas y bajar persianas, mantendrán la casa más fresca, y por tanto, la necesidad de mantener el aire acondicionado encendido, también.
Con estas sencillas acciones, conseguiremos reducir el consumo energético, y eso es bueno no sólo para evitar el cambio climático (Vídeo Cambio climático en España) sino para nuestro bolsillo.
Podemos ayudarte, contacta con nosotros y te diremos cómo.
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